martes, 19 de enero de 2010

Nuevas baladas de la piedra



Juan Pablo Mejía


Canción para mi ojo derecho


EL CENTRO de la ciudad
habita
mi ojo derecho.

Toda la noche
su marea estelar
enjaula los temores.

El tiempo es en mi cráneo
una hoja que danza
sobre la piel oblicua del viento.

Tan pronto haya cesado la lluvia
en las galerías del pensamiento
descansaré.



Nueva canción para Auriel



LA BRISA marina lava tu cabellera, Auriel.

Los árboles marchitos son bellos
para los pájaros silvestres
que abatidos por la fe
se dicen oraciones al oído
mientras se precipitan a tierra.

Pero los he querido oír, Auriel.

He prolongado la noche
para verlos deambular
desnudas las manos
y en la frente
una señal constante de ceguera.

Ahora danzan con cada palabra que escribo.

Pero sus voces ya no se oyen, Auriel
no llaman más a mi puerta.

tomado de "Balada de la piedra que canta"

Poesía bicéfala

Wilver Moreno Tineo

Ceguera

Este espejo no es mío. No son los ardores los que me impiden tocar el centro. No soy yo el que cae como animal nocturno ni mi cuerpo el que se estira como reptil. Yo no veo. No siento más dolor ni más afecto. No escondo nada bajo las arrugas de mi piel. Tengo sólo las uñas laminadas y los ojos duros como cristales.


Descenso

Abres tu boca y entra mi dedo inmensa tu boca se abre y yo entro completo primero mi dedo luego mi mano mis dos manos mis cabellos mis hombros mi cuerpo entero tu boca inmensa me contiene tu noche negra y clara pura y pura sobre todo tu boca inmensa que se ocupa conmigo tu lengua moviéndome juega con mi cuerpo cada vez más ínfimo más residual tu cielo se eleva tu conducto se abre mis ojos se ciegan siento atravesar tu cavidad interna siento ser destilado a mi estado real tu cuerpo inmenso lento y hermoso llenándome de jugos celestiales me consume y me excreta y yo caído y glorioso me disipo en luz gracias a tu digestión oh evanescente sensación quise desprenderme del cuerpo que tengo y terminé sumergiéndome en él
tomado de "Detritos"

Poesía de Gladis Mendía


el alcohol de los estados intermedios

el tiempo está en guerra por violencia pura por saberse infinito y libre transmitiendo en todos los canales simultáneamente el tiempo es dios es el asma que arde sí hay parpados en los estados intermedios el asma es parpadeo como eslabones liquidos llovemos a veces se encuentra miel en algunos ojos pero la miel es el alcohol del incendio
tomado de "el alcohol de los estados intermedios"


SEGUNDO PELDAÑO

Turbaciones
Nada te turbe;
nada te espante;
todo se pasa

Santa Teresa de Ávila

hermanas
esta náusea no se quita
miro alrededor y nada
de nuevo todo está oscuro

cuándo se acabará esta noche
cuándo llegará el alba
hermanitas siento mareos de abismo

ayer encontré serpientes bajando las escaleras
tropecé con ellas
caí
era un hervidero al caer tapé mis oídos
y escuché una voz

pienso salir del castillo
la voz insiste que no lo haga

esta voz es tan dulce
susurra que deje de andar por castillos ajenos
que afuera no hallaré paz

tengo sed
tengo hambre
pero esta sed
y esta hambre no se quitan con pan y agua

hijitas
en ocasiones me busco
y no me hallo
ando derramada
como charcos por las escaleras

paz
me dice el dulce susurro
pero cómo
tomado de "El tiempo es la herida que gotea"